Menú Principal
26 de octubre de 2020

Salud mental infanto adolescente: en qué debemos poner atención

En el mes de la salud mental, el cuidado y protección hacia los menores no debe pasar desapercibido.

El pasado 10 de octubre fue el día internacional de la salud mental una efeméride que durante todo el mes pone en valor la preocupación que reviste esta materia. En el especial contexto de la actual pandemia, los especialistas llaman a poner atención en la forma en que las niñas, niños y adolescentes se comportan o manifiestan.

La Dra. Emilia Monsalve, Psiquiatra infanto adolescente y encargada de la Unidad Infanto Adolescente del Hospital de Coquimbo destacó el actual escenario, indicando que “existe una gran pandemia, que son las enfermedades del área de la salud mental en niños, adolescentes y también en los adultos, muchas personas desconocen que los niños también se deprimen y que los niños incluso desarrollan conductas o tentativas suicidas, lo cual es la segunda causa de muerte en la población adolescente, solo luego del cáncer.”

No hay edad para considerar cuando se presenta o no una patología en niños, sin embargo, si hay edad para observar ciertos procesos que manifiestan los niños enfatiza Monsalve, “un ejemplo son las pataletas o berrinches son normales entre los 2 y 5 años,  luego ya no es normal, no debiera existir, lo mismo con el amigo imaginario que puede estar hasta los 5 o 6, pero no es normal que un niños a los 9 o 10 años lo tenga, por lo tanto lo normal o patológico, siempre depende de la edad del niño.” Sostiene.

La especialista hace especial hincapié en que el comportamiento de los niños, así como también ocurre con los adultos, poseen un estado basal que normalmente los define, sin embargo, “cuando hay un cambio en la conducta o aparecen conductas extrañas, los niños se retraen, por ejemplo, ahí debemos poner la alarma”, señala la Dra. Monsalve.

Las niñas, niños y adolescentes tienden a expresar a través de su cuerpo, sus emociones o problemas, lo cual puede verse reflejado en cambios enérgicos y bruscos de conducta, es así como también pueden desarrollar cuadros ansiosos, los que se han visto incrementados durante el desarrollo de la pandemia “ya que esta situación ha resultado ser un factor estresor que puede generar angustia en una población como la infanto adolescente, que es la más frágil frente al stress”, destaca la psiquiatra del Hospital de Coquimbo.

Factores protectores

Algunos aspectos a considerar, por padres, tutores o cuidadores que pueden marcar la diferencia y propender a mantener una salud mental adecuada para nuestros niños son los que detalla la Dra. Monsalve.

-Demostrar afecto y cariño para hacer sector al niño querido y contenido es un factor protector muy importante.

-Hablar, conversar, dialogar y no subestimar a los niños.

-Validar sus emociones, pero faltar también aquello que perciben, lo que no significa omitir.

Para lo anterior se requiere indudablemente que el adulto protector pueda también autorregularse y mantener una salud mental apropiada de manera de traspasar este bienestar a niñas, niños y adolescentes