Innovador Centro Regional de Resolución Quirúrgica ya comenzó a operar en el Hospital de Coquimbo
Este nuevo modelo permite aumentar el número de cirugías que se realizan a diario en los pabellones, contribuyendo así a disminuir los tiempos de espera.
Con el objetivo de optimizar el uso de los recursos para avanzar en la disminución de los tiempos de espera, el año 2022 el Ministerio de Salud implementó en unos pocos hospitales un modelo de alta resolutividad de Cirugías Mayores Ambulatorias (CMA), que incorporaba una mirada eficiente y centrada en las cirugías y los procedimientos más frecuentes en la lista de espera.
Fue así como nacieron los primeros Centros Regionales de Resolución (CRR), una estrategia a la que recientemente se sumó el Hospital San Pablo de Coquimbo, que busca aumentar el rendimiento de los pabellones utilizando múltiples iniciativas que han tenido resultados sobresalientes en los establecimientos pilotos.
Ingrid Murillo fue una de las primeras beneficiarias de esta iniciativa en el recinto porteño. Ella estaba esperando su cirugía ginecológica por casi dos años, por lo que se sorprendió cuando un día la contactaron y le agendaron rápidamente una hora para operarse. “Hace rato quería cerrar la fábrica. Todo fue excelente, porque me llamaron una vez y a la semana me dijeron que ya estaba programada la intervención, que alistara mis cositas porque estaba todo OK. Venía esperando por casi 2 años y me preocupaba, pero gracias a Dios, todo excelente”, indicó.
La misma opinión comparte Daniza Araya, quien destaca lo rápido de la gestión tras recibir el llamado de los equipos. “Me contactaron la semana pasada. Un día jueves me avisaron que ya tenía la hora programada para esta semana, luego me enviaron todas las indicaciones para poder presentarme hoy y me parece excelente, porque ya estaba esperando mucho tiempo”, comenta.
¿Cómo beneficia a los pacientes el contar con un CRR en el hospital?
Las Cirugías Mayores Ambulatorias son aquellas intervenciones donde los pacientes reciben el alta el mismo día de la operación, generando una recuperación más rápida debido al poco tiempo de separación del entorno familiar, educacional o laboral.
Más allá de la operación en sí, esta estrategia también realiza un fuerte trabajo previo, tomando contacto con los pacientes en lista de espera y revisando los exámenes que necesitan para llevar a cabo cada cirugía. Esto permite acortar el tiempo de preparación y aumentar la producción quirúrgica. De hecho, los recintos que implementaron esta estrategia este año, aumentaron su rendimiento en un 23%.
“Ha sido muy satisfactorio para el hospital, de mucho éxito y hemos logrado conseguir los objetivos, que era mantener el funcionamiento de los pabellones durante 8 horas, haciendo 5 intervenciones como mínimo, y de hecho estamos un poquito sobre 6 en promedio. En este momento tenemos solo un pabellón, pero el objetivo es tener dos, o sea el 20% de la dotación total del hospital en base a esta estrategia, dependiendo de los recursos que recibamos. Con un pabellón, estaríamos haciendo 100 cirugías mensuales, entonces en 12 meses ya serían 1.200 cirugías, que es un muy buen número. Recordemos que esta es una estrategia para sacar listas de espera, eso significa que incluso algunas que tienen tiempos muy prolongados, de 4 a 5 años por ejemplo, van a tender a reducirse, y esa es la mejor noticia para nuestros pacientes”, explica el Dr. Eduardo Nieme, subdirector médico de Atención Cerrada (S) del Hospital de Coquimbo.
Sebastián Zapata, jefe de la Unidad de Cirugía Ambulatoria del recinto, también menciona lo positivo de este cambio, destacando la excelente producción y, sobre todo, el compromiso de los equipos. “La estrategia busca que se realicen por lo menos 5 procedimientos, pero en general estamos haciendo 6, e incluso hemos hecho 7 el mismo día. En un comienzo iniciamos con cirugías infantiles como la fimosis, pacientes de urología con patología genital, pacientes de traumatología, maxilofacial y ginecología. El principal beneficio es que se destina un pabellón exclusivo para cirugías que generalmente son postergadas por no tener una complejidad tan alta, ya que la urgencia diaria y las complicaciones propias de los hospitales hacen que vayan quedando en lista de espera. El compromiso del Ministerio de Salud y el nuestro es dar respuesta a ese tipo de cirugías”, agrega el especialista.
“La Unidad Prequirúrgica de nuestro hospital ha sido esencial en el inicio del CRR”
Cabe destacar que la implementación exitosa de esta estrategia se debe en gran parte a los equipos de trabajo, quienes se han adaptado a esta nueva modalidad logrando una excelente producción quirúrgica.
“El equipo del pabellón de la UCA es bastante comprometido. Igual ha sido un cambio en la dinámica de trabajo, porque nos exige tiempos mucho más acotados. La Unidad Prequirúrgica de nuestro hospital ha sido esencial en este inicio del CRR acá en nuestro hospital, porque ellas son las encargadas de gestionar a los pacientes, a sus exámenes, llamarlos, programarlos y otorgar un número a cada especialidad. Así que son un pilar fundamental para que este CRR funcione de manera eficiente, y tengamos un cumplimiento del 100% de la programación para así disminuir las suspensiones diarias que habitualmente tenemos en los pabellones”, detalló Odette Henríquez, enfermera jefe de la Unidad de Cirugía Mayor Ambulatoria del establecimiento porteño.
Con la habilitación de este pabellón bajo la estrategia CRR en el recinto, el Hospital de Coquimbo se suma a los otros 19 dispositivos que lo han implementado en todo el país. Y para este segundo semestre se espera que nuevos establecimientos se sumen, llegando a 23 en todo el territorio nacional.