La importancia de cuidar a los adultos mayores en tiempos de coronavirus
La geriatra del hospital de Coquimbo señala que es importante estar atentos a sus cambios de hábitos, ya que son la población que está en más riesgo.
De acuerdo con los últimos datos entregados por el Ministerio de Salud, el 11% de población confirmada y notificada a nivel nacional con Covid-19 son personas mayores de 65 años y del total fallecidos a nivel país el 93% pertenecen a este grupo etario. Esto debido a que ellos son particularmente vulnerables a infecciones graves producto de un debilitamiento del sistema inmune debido a la edad.
De ahí la importancia de preocuparse y cuidar el doble a los adultos mayores.
Estas lamentables cifras hacen que las personas mayores y sus familias se pregunten cuáles son las precauciones adicionales que deben tomar.
La doctora jeja de la Unidad Geriátrica Agudos del Hospital San Pablo; Paulina Zambra, reitera que el distanciamiento social es fundamental para el control epidémico. Sin embargo, señala que hay que estar atentos, porque la soledad podría generar un mayor riesgo para la salud.
“Es muy importante mantener la comunicación constante, reemplazar las visitas por llamadas telefónicas frecuentes, mensajes de texto, videollamadas u otra forma de comunicación. Hay que estar atentos ante cualquier necesidad”, señaló.
Porque, si bien la enfermedad por COVID – 19 se presenta comúnmente con tos, fiebre, dolor de garganta y dificultad respiratoria, en el caso de las personas mayores los síntomas podrían ser diferente y la enfermedad podría “presentarse sin fiebre, decaimiento, desorientación, agitación u otro cambio en estado mental habitual. Por ello hay que estar atentos ante cualquier cambio de conducta”, explica la enfermera de la Unidad de Geriátrica de Agudos del hospital, Daniela Silva.
Junto con ello, la enfermera explica que los últimos cambios en la rutina de las personas pueden afectar anímica y emocionalmente a los adultos mayores, por ello, aconseja “estar atentos a los síntomas de trastornos en la salud mental. En ellos suelen ser la apatía, el desgano y abandono de intereses, inapetencia, menor higiene personal y tristeza”.
A quienes viven con personas mayores se les recomienda poder mantener, en la medida de lo posible, rutinas y dinámicas establecidas desde antes, a las cuales ellos ya estén acostumbrados, por ejemplo; el horario de las comidas, siestas, lectura, ver TV, horario de baño y aseo, etc.
Junto con ello, la geriatra Zambra recomienda también limitar el acceso a la información, entregando sólo la justa y necesaria, para no generar mayor temor y preocupación en el grupo familiar.
Desde el aspecto físico, es importante mantener los buenos hábitos, incluyendo suficiente tiempo para dormir, la alimentación saludable y el ejercicio. Este último, puede tener beneficios mentales y emocionales.